Edición Nº 1039 - Viernes 13 de junio de 2025

'Vivimos con miedo': cómo la violencia de las bandas se ha apoderado de Perú

Edición Nº 1039 - Viernes 13 de junio de 2025. Lectura: 6'

A propósito compartimos una excelente crónica de Mitra Taj para el Times

Jorge Tejada se encontraba examinando los restos carbonizados de un autobús en un estacionamiento cercano a su negocio de reciclaje en Lima. Le habían prendido fuego durante la noche, en lo que, según los vecinos, fue una represalia de una banda que extorsiona a empresas de autobuses locales.

Tejada, de 50 años, ha perdido la cuenta de cuántos ataques como este han sacudido su barrio en el último año. Explosivos en bodegas. Restaurantes tiroteados. Su propio patio de reciclaje fue incendiado y dañado luego de que ignorara la exigencia de una banda de pagarle 530 dólares al mes.

Podría haber sido peor. Un farmacéutico fue asesinado a balazos detrás del mostrador de su tienda, y varios propietarios de tiendas se han escondido, dijo.

“Anteriormente todo esto era una zona tranquila”, dijo Tejada, describiendo cómo el antiguo asentamiento irregular se convirtió en un distrito oficial de la capital tras décadas de trabajo duro y organización comunitaria. “Ahora todos vivimos con miedo acá”.

Cada vez más peruanos se sienten así. La nación sudamericana está lidiando con una extraordinaria ola de delincuencia, avivada por el incremento de las extorsiones que ha ocurrido como consecuencia del control cada vez mayor que las bandas ejercen sobre las zonas urbanas.

Las denuncias de extorsión en todo el país se han disparado desde 2017, pasando de unos cuantos cientos al año a más de 2.000 al mes este año, de acuerdo con la policía nacional. Y las estadísticas muestran que la cantidad de asesinatos cometidos por sicarios a sueldo también ha aumentado significativamente en los últimos años.

Las víctimas reciben las exigencias de pago por protección a través de mensajes de WhatsApp, notas escritas a mano o visitas en persona. Las represalias contra aquellos que no pagan se llevan a cabo mediante ataques con dinamita o incendios provocados, o con hombres armados que llegan en motocicletas y matan a sus víctimas en la calle.

La epidemia de delincuencia ha rebasado a las autoridades y amenaza con transformar un país latinoamericano relativamente tranquilo en una fuente de inestabilidad regional. El banco central ha advertido que una epidemia de extorsión está asfixiando la actividad económica y, según los expertos, contribuye al aumento de la migración.

“Perú parece estar ascendiendo rápidamente a las filas de los países más peligrosos de Latinoamérica”, dijo Eduardo Moncada, politólogo de la Universidad de Columbia, quien se enfoca en la delincuencia en Latinoamérica. “Y es una posición difícil porque es muy complicado volver a bajar”.

En lo que va de este año, dos periodistas fueron asesinados a tiros por hombres armados en público. En enero, detonaron dinamita en una fiscalía regional, hiriendo a dos personas.

Y en marzo, dos hombres armados atacaron a tiros el autobús de un popular grupo de cumbia, matando a su cantante, Paul Flores. Después, otros músicos, como Christian Yaipén, vocalista de otro grupo de cumbia, relataron sus propios enfrentamientos con extorsionadores.

“Es todo el país sufriendo esto”, dijo Yaipén a los periodistas. “Todos los peruanos que salimos a trabajar no sabemos si vamos a regresar a nuestra casa vivos”.

En uno de los peores episodios de violencia, en mayo se descubrieron los cadáveres de 13 mineros de oro en un yacimiento explotado por la mayor empresa minera de Perú, una matanza que, según las autoridades, fue orquestada por el jefe de una banda.

Los esfuerzos de la presidenta Dina Boluarte por hacer frente a la violencia mediante la imposición de estados de emergencia parecen haber servido de poco para controlar la delincuencia desenfrenada. Boluarte, quien lleva tres años en el poder, ha sugerido que el aumento de los niveles de delincuencia se debe en parte al gran número de migrantes venezolanos que han llegado al país en los últimos años, aunque no hay pruebas de que ellos cometan delitos en mayor proporción que los peruanos.

Boluarte ha prometido desplegar una campaña más dura contra los grupos delictivos. “En este gobierno el crimen no tiene lugar y esa es nuestra lucha día a día”, declaró a los periodistas en abril.

La extorsión atrae a las bandas porque proporciona un flujo constante de dinero en efectivo al tiempo que ayuda a consolidar el control sobre un territorio, explicó Moncada. “Te permite reclutar a lugareños para que se conviertan en una especie de ojos y oídos tuyos”, dijo.

La extorsión también requiere el uso frecuente de la violencia para infundir miedo y garantizar la obediencia. Algunos barrios de Lima han sido tan sacudidos por la delincuencia que las escuelas han comenzado a dar las clases por internet.

Los más afectados por las extorsiones no son los ricos, que viven en enclaves seguros y pueden pagar seguridad privada, sino los trabajadores pobres y los dueños de pequeñas empresas, que dependen de una policía con insuficiente personal y lastrada por la corrupción.

En el último año se ha detenido a decenas de policías acusados de colaborar con bandas o de traficar con armas y municiones, según la prensa local.

“La estrategia de la delincuencia el día de hoy es atacar a las zonas más vulnerables. ¿Y por qué ataca a las zonas más vulnerables? Porque ahí hay impunidad”, dijo Jesús Maldonado, alcalde del distrito más grande de Lima, San Juan de Lurigancho, que con más de 1,2 millones de habitantes cuenta solo con 600 agentes de policía.

Prácticamente cualquier operación que requiera interacción con el público y se haga con dinero en efectivo puede ser presa de los extorsionadores. Ferreterías, clubes nocturnos e incluso comedores sociales y refugios para perros han sido blanco de extorsionadores.

Un conductor de mototaxi de Lima comentó que gana entre 11 y 19 dólares al día, pero que reserva 1,30 dólares para los extorsionadores. Conoce al menos a cinco compañeros conductores que han sido asesinados a balazos por resistirse a sus exigencias.

Erika Solis, investigadora del crimen de la Pontificia Universidad Católica del Perú, dijo que la violencia realmente empezó a aumentar al inicio de la pandemia de COVID-19 en 2020, cuando los confinamientos dejaron las calles vacías y llevaron a los delincuentes a pasar del robo a la extorsión vía WhatsApp.

Los miembros de bandas venezolanos que llegaron como parte de una oleada migratoria se han sumado al problema de la delincuencia, dijeron los expertos. Casi una década de agitación política, luchas internas en el gobierno y casos de corrupción de alto nivel han mella­do la capacidad del Estado para prestar servicios, incluida una actuación policial eficaz. En los últimos cinco años, Perú ha tenido cinco presidentes.

Los críticos afirman que Boluarte y los legisladores han contribuido a la crisis al impulsar leyes que dificultan la prisión preventiva y acortan las penas para quienes delinquen por primera vez.

“Se salió de control”, dijo Marita Felipe, cuyo padre, Luis Felipe, de 62 años y ex policía, fue asesinado a tiros en octubre mientras se dirigía a casa.

Carlos Saenz, un fabricante textil de Lima, cerró su taller en diciembre de 2023 luego de que una banda que le exigía más de 5.000 dólares comenzara a enviarle fotos que dejaban claro que lo vigilaban. Ahora opera sin letrero visible y compró una pistola.

“¿Qué pasa si me buscan de nuevo?”, dijo. “¿Quién me va a proteger?”.



Cien días de gobierno: mucho ruido, pocas nueces y varios bochornos
La herencia, un gran capital
Julio María Sanguinetti
Premio Ana Frank
Blindaje institucional
Pónganse de acuerdo, pero no ensucien a los demás
Un polémico retorno a Cancillería
¿Otra vez improvisando?
Un mundo convulsionado: de Occidente llegan noticias
Carta abierta a los antisemitas uruguayos: una reflexión a propósito de la Resolución del Secretariado Ejecutivo del Frente Amplio del 3 de Junio
Jonás Bergstein
Fortaleza y resistencia
Susana Toricez
Confederación Argentina
Daniel Torena
'Vivimos con miedo': cómo la violencia de las bandas se ha apoderado de Perú
El relato populista que domina la política argentina
La inmensa minoría
¿Hacia dónde va la cooperación de la UE en Latinoamérica?
Frases Célebres 1039
Inicio - Con Firma - Ediciones Anteriores - Staff Facebook
Copyright © 2024 Correo de los Viernes.