La vigencia del Batllismo en su innegable y constante aporte a la sociedad en todas las épocas de nuestra vida republicana, hace que sea una necesidad que su presencia se potencie en el próximo gobierno, y eso es una responsabilidad del Partido Colorado, único lugar donde lo expresado es posible.

Como prueba por el absurdo de la vigencia y necesidad de la aplicación del pensamiento batllista, vemos que en la oposición, representada ahora sí solamente por emepepistas -tupamaros- y comunistas, desde algún oscuro rincón del conglomerado, algunos frustrados aspirantes al poder por sí mismo, intentan enarbolar nuestra bandera, incluso con imágenes de Batlle y Ordóñez, reafirmando la total ausencia de ideas en su propuesta, y apoyando, sin darse cuenta, las nuestras. Gracias por ello.

Porque la absoluta polarización -ahora sí marcada a fuego- entre el republicanismo de la Coalición y el totalitarismo de los sectores que mandan en el bloque opositor que ha perdido su "amplitud" para siempre, no da lugar a dudas en donde está la Republica que debemos defender.

El Batllismo no sólo es permanencia en su ideario, sino que por supuesto lo es su legado. El primigenio, que creó las instituciones y dio forma al País, y el reciente, el de las últimas décadas antes de los quince años de oscurantismo y debacle, a través de múltiples acciones que apuntaron a lo social, plasmadas en escuelas de tiempo completo, CAIF, reforma educativa y decenas de logros incorporados de tal forma a nuestra vida cotidiana, que ya hasta olvidamos el esfuerzo que supuso su concreción.

Y si hablamos de conocimiento y entendimiento de los tiempos actuales pensando en las problemáticas a resolver, no hay dudas de que nuestro candidato, Tabaré Viera, es en forma natural quien debe llevar adelante la propuesta. Es quien nos representa.

A modo de ejemplo, diremos que en la reciente inauguración de nuestra sede central de la lista 15 2000 que con Adrían Juri impulsamos, escuchamos al propio Tabaré expresarse con relación a un asunto en el que a su entender, el estado está moroso, y es la situación de los adictos que es "realmente un drama, y que está en la base de los problemas sociales y de seguridad". Para ello propone la creación de un Sistema de Rehabilitación de Adictos (SIRA) como herramienta, tan innovador como necesario.

Las propuestas que apuntan a solucionar las urgencias, surgen de la sensibilidad, de la apreciación de la realidad, y no apuntan a logros electorales. Apuntan a la gente, en su vida de convivencia republicana.

Es en ese sentido que debemos prepararnos para escuchar desde la oposición, en su campaña, todo el panfletario repertorio de la mentira sin propuestas, de la mano de la mediocridad, el resentimiento y la metodología que los alumnos de Goebbels dominan a la perfección, pero desconociendo que el pueblo que puso a la Coalición en el gobierno sabe perfectamente que ni el republicanismo ni el batllismo son transferibles a su esencia totalitaria.

Nosotros miramos al futuro con confianza en nuestras fuerzas y capacidades, lo que además, inyecta ganas y alegría.