¡Recién ahora!
Por Julio Aguiar Carrasco
 El Presidente Vázquez reconoció que se siente decepcionado por las inconductas de Sendic. Demoró en darse cuenta.
Cuando un partido político sufre un desgaste grande, prematuro o no, comienzan a surgir detalles notorios que alertan sobre el tema.
Creo que el Frente Amplio ya hace un tiempo que comenzó ese desgaste, que lo debilita, lo divide, se pierden las referencias y los mandos comienzan a agotarse.
Me quiero detener en un hecho que, sin ser de enorme magnitud, muestra el gobierno que tenemos.
Sin mucho sentido, aparentemente, pocos días antes de que el Juez resolviera el procesamiento de Sendic, el presidente Vázquez sacó de nuevo el tema.
El Presidente, el 4 de julio del pasado año, se cortaba las vestiduras diciendo que “es el bullying más fantástico que he visto en mi vida” que “desde el punto de vista humano, me hace tener un sentimiento de rechazo”
Vázquez nombró a Sendic Vice-Presidente de ANCAP en el 2005, cuando el actual Intendente de Montevideo, Martínez, era el Presidente.
Cuando este salió, Sendic ocupó la presidencia.
En el 2011, Vázquez, de cara a un segundo período presidencial, decía que Sendic “sería un excelente candidato a la vice”. Mujica agregaba que “Sendic tiene una especie de glamour hecho por la historia del padre, por la mística”.
Brecha agregaba que Sendic era “uno de los elegidos de Vázquez...”, lo que reforzó su rol de vocero en el FA.
Sendic asumió como vice en el 2015, pero ya en agosto de ese año se había formado una Comisión Investigadora en el Parlamento, por su gestión en ANCAP.
En marzo del 2016, ya en pleno ajetreo por la Comisión Investigadora, el entonces presidente Vázquez dijo que Sendic tenía “toda su confianza”.
Ahora, Vázquez le suelta la mano definitivamente a Sendic, para tomar distancia, ante la resolución judicial: “me sentí decepcionado... conocer las faltas de ética. (¡Vaya novedad!).
¿Qué es peor, el bullying del que habló Vázquez en su momento; o pegarle la última y más letal patada en el piso a alguien que ha sido linchado (según el Presidente)?
La conducta del Presidente no es una novedad. Como se dice comúnmente, no quiere a nadie.
La política es muy amarga. Pero con amigos así no se precisan enemigos. ¿Venganza? ¿Ajuste de cuentas? Allá ellos con su conducta, pero demuestran un encono particular que no anticipa nada bueno.
|
|
 |
Muertes en la calle: los dogmas cuestan vidas
|
La contradicción íntima
Julio María Sanguinetti
|
El reciclaje del fracaso
|
Un acto que nunca fue, pero que finalmente será
|
Perlitas del Sunca-gate
|
Guerra sí, guerra no...
|
Compañeros solidarios
|
Hay que sincerarse: asistencia a la Previsión Social
|
El peso del cargo: cuando la emoción desdibuja al Estado
Laura Méndez
|
Israel-Uruguay: un vínculo invulnerable
Gabriela y Roberto Pena Schneiter
|
El mejor tango
Susana Toricez
|
¿Cuál es la importancia estratégica del estrecho de Ormuz?
|
La decisión de Trump fue valiente y correcta
|
Del idealismo al clientelismo: la ruta de la nueva izquierda latinoamericana
|
Poder, ¿para qué?
|
Frases Célebres 1041
|
|
