El exfiscal, a quien nadie podrá acusar de "hacerle el juego a la derecha", aseguró que la exsubsecretaria Ache es inocente debido a que no cometió ningún ilícito ni ninguna falta administrativa. De hecho, Díaz aseguró que el Estado uruguayo no estaba en condiciones de negar el pasaporte a Marset, exculpando al resto de los jerarcas de gobierno.
"Si nadie hizo nada, que se archive de una vez", reclamó el exfiscal Díaz ante la suspensión de las declaraciones dispuesta por el fiscal de Delitos Económicos y Complejos de 1er turno, Alejandro Machado, en el marco de la investigación sobre la entrega del pasaporte uruguayo al narcotraficante Sebastián Marset.
El exfiscal de Corte, que representa a Carolina Ache, aseguró que la postergación de las actuaciones "perjudica" a su cliente. Entrevistado en radio Sarandí, aseguró no tener "una respuesta clara" respecto a los supuestos delitos que se están investigando ya que en el procedimiento no se ve nada "que indique que se haya cometido un delito" por parte de ningún jerarca del gobierno.
No obstante, Díaz apuntó al único hecho que hasta el momento no se ha dilucidado y que involucra al cónsul de Emiratos Árabes. Según la misma funcionaria habría declarado en un audio, cuyo contenido publicó el semanario Búsqueda, que buscó facilitar el pasaporte a Marset en aquel país cambiando la categoría de otro trámite que el narcotraficante tenía en proceso.
Díaz fue tajante al respecto: "Que salte todo lo que tenga que saltar, que se sepa toda la verdad y si nadie hizo nada, que se archive de una vez por todas para no seguir dilatando una investigación que ya lleva un año", dijo a Sarandí. Además, agregó, "si uno analiza la reglamentación, el Estado uruguayo debía dar [el pasaporte a Marset] no tenía la discrecionalidad de darlo o no dar".
Aunque Díaz aseguró que no había motivos para negar el pasaporte a Marset, aclaró -así y todo- que la Dra. Ache no tuvo ningún tipo de participación en la expedición del mismo. En rueda de prensa Díaz reafirmó sus dichos:
"No estaba dentro de su competencia o sea las oficinas que participaron no dependían de ella, no reportaban a ella, no estaban subordinados jerárquicamente a ella. Esto surge de la investigación administrativa de la Cancillería, donde queda claro que ella no dio ninguna orden, que ningún jerarca dio orden alguna. Desde esa situación, de ese estado de inocencia, lo que pretendemos es que las cosas queden totalmente claras y que este capítulo se cierre para poder hacer lo que quiere hacer toda persona que es inocente, que es continuar con su vida con tranquilidad".