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¿"No preví y no preveo"?

Por Santiago Torres

En la mañana del pasado miércoles 27, el Ministro Astori concurrió a la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados. Allí estuvo ante los legisladores durante dos horas, pero sus manifestaciones pueden resumirse en una sola oración: no previmos que las cosas fueran a ir tan mal y tampoco estamos en condiciones de prever cómo vamos a hacer en el futuro para mitigar la situación.

Las dificultades fiscales eran previsibles ya en la mitad del “mujicato” y lo señalé a finales de 2012. En realidad no es que fueran previsibles: ya estaban produciéndose. Y Astori, el Vicepresidente, lo sabía de sobra.

A su vez, el frente externo también era notorio que iba a desmejorar. También lo subrayé a mediados de 2013, advirtiendo lo que empezaban a mostrar los mercados a futuro en relación a algunos de nuestros principales rubros de exportación. Y de allí en adelante todo se fue haciendo cada vez más claro, incluyendo la situación mundial de los lácteos, de la carne y el sombrío panorama de Argentina y Brasil. Es inconcebible que Astori no lo viera.

Ya instalados en plena campaña electoral, el entonces Vicepresidente Astori optó por “decir cosa que no es”, como expresara el potro a Gulliver en su aventura en el País de los Houyhnhnm, porque su vocabulario desconocía la palabra “mentira”. “No recuerdo una situación fiscal más sólida que la actual”, expresó con rostro de cemento mientras las cuentas fiscales estaban al rojo vivo.

Luego vino un Presupuesto desfinanciado desde el arranque, pero eso Astori —estoy seguro— también lo sabía. Tanto lo sabía que la ley, insólitamente, tiene previsiones sólo hasta mitad del quinquenio. O sea, el Poder Ejecutivo, para evitarse líos políticos de entre casa, sólo buscó tirar la pelota hacia adelante, cuando se tornaría evidente que se estaba ante una situación fiscal insostenible y el Frente Amplio debería, entonces, aceptar recortes sustantivos inevitables.

Y esta última, la reacción política del oficialismo y de sus aliados sindicales, es el factor que le impidió responder a Astori la pregunta que le formulara el diputado Conrado Rodríguez (PC – EA) acerca de cómo haría para cumplir con la meta de reducir déficit fiscal al 1% del PIB al finalizar el gobierno, en un escenario de estancamiento económico y con los problemas financieros de ANCAP.

Tiempos económicos muy difíciles se aproximan vertiginosamente y el gobierno, en lugar de fijar un rumbo, aunque fuera discutible, y así brindar certezas, sólo sabe sembrar más incertidumbre.
Correo de los Viernes.
Publicación Oficial de la Secretaría de Prensa del Foro Batllista.