Correo de los Viernes - Martínez y la ley del espejo

Martínez y la ley del espejo

Por Ruth Furtenbach

En el cierre de campaña del Frente Amplio hacia las elecciones del pasado 27 de octubre, el Ing. Martínez pidió no votar lo que a su juicio constituía “un cheque en blanco”, aludiendo a las propuestas del candidato del Partido Nacional Dr. Luis Lacalle Pou y siguiendo los dichos pronunciados días antes por su asesor Ramón Méndez. Este último había dicho que la gente que vota al nacionalista “no tiene la menor idea” de lo que va a votar, refiriéndose al proyecto de “ley de urgencia” que aún no estaba terminado debido a que a esa altura aún debía ser acordado con el resto de la oposición. (Ecos 16/10)

No obstante, causó extrema sorpresa la incertidumbre que Martínez le trasmitió a la población en el debate llevado a cabo el día miércoles pasado entre los presidenciables, cuando Lacalle Pou cuestionó el contenido del programa del Frente Amplio, principalmente en lo concerniente al aumento de impuestos y el combate al narcotráfico. Martínez respondió en las dos oportunidades ante los estupefactos televidentes que, el programa de gobierno del Frente Amplio no mandata y que contiene sugerencias que el candidato puede seguir o no, estableciendo que lo que vale es lo que él disponga.

Por lo cual, más allá de los innumerables análisis que podamos hacer al respecto, ya que al programa del Frente lo aprobó un congreso que Martínez parece desconocer, podemos concluir que a este se le aplica claramente la llamada “ley del espejo”, que establece que lo que uno ve en los demás es su propio reflejo.

Dicen los seguidores de este pensamiento que proviene de la cultura oriental que, cuando vemos cosas que no nos gustan en otras personas, en realidad estamos viendo aquello que vibra con nosotros mismos. Los otros nos están haciendo de espejo, nos están mostrando qué hay en nosotros que nos gusta o qué no nos gusta. Esta línea de pensamiento sostiene que algunas personas caen dentro de un mecanismo de defensa llamado proyección, que les permite ver en otras personas sus propios defectos o virtudes y tienden a sentirse amenazados por inseguridad o baja autoestima. Aseguran quienes defienden estos postulados, que debe utilizarse esta técnica para tomar conciencia y responsabilidad.

Y conciencia y responsabilidad es lo que parece faltarle a Martínez cuando intenta reflejar en su contendiente sus propias carencias. Con la afirmación realizada en el debate pasado respecto a la aplicabilidad del programa de gobierno del Frente Amplio, no hizo más que confirmar que el “cheque en blanco” lo suscribirá quien lo vote este próximo 24 de noviembre, ya que si solo cuenta con recomendaciones y lo que vale es lo que él disponga a su solo arbitrio según las circunstancias, realmente estamos ante una situación en la cual la gente no tiene la “menor idea de lo que va a votar”, como pronunciaba Ramón Méndez, sin reconocer que en realidad se refería a su propio candidato.

Contrariamente, tenemos elementos suficientes para asegurarle a la ciudadanía que quien opte por votar al Dr. Lacalle Pou el próximo 24 de noviembre, está adhiriendo a un programa conjunto de la coalición opositora, plasmado en un documento denominado “Compromiso por el país”, firmado el martes 5 de noviembre, donde se detallan las grandes líneas estratégicas sobre las que han llegado a acuerdos y se han “comprometido” los partidos que la componen.