Correo de los Viernes - Martinez: el agro se salva con la agro-ecología...

Martinez: el agro se salva con la agro-ecología...

Por Tomás Laguna

¿Qué espacio tuvo la producción agropecuaria en el debate entre los candidatos a la presidencia? ¿Qué mención mereció la actividad de nuestra economía que es responsable del 80% de las exportaciones de bienes?

El debate entre los candidatos seguro merece variados análisis, más allá de la claridad expuesta por quién está preparado para asumir la conducción de los destinos de la República frente a un candidato oficialista balbuceante, tenso, agresivo y poco creíble. En ese contexto de intercambio de acusaciones y propuestas, resulta sustantivo calificar el tiempo y propuestas dedicadas a la difícil situación de varios rubros del agro, lo que debió merecer al menos una buena parte de alguno de los bloques.

Queremos detenernos en las propuestas para el agro realizadas por el candidato oficialista.

Para los rubros más afectados en su competitividad, caso de la lechería y el arroz, las mejores ideas fueron una graciosa oferta de nuevos instrumentos financieros de los que ya se ha hecho uso y abuso. Algo así como salvavidas de plomo para un náufrago. No fue capaz de hacer referencia a la competitividad que exige el agro negocio de exportación y su dependencia del costo país. Tal vez espere que alguna circunstancia de buenos precios le permita volver a las facilidades de los años del primer y segundo gobierno del FA.

Pero se animó a innovar. Resulta que descubrió un nuevo rubro dónde podemos ser competitivos. La agro-ecología faltaba más. Muy ideológico el recurso. Y por supuesto para productores familiares, estigmatizando una vez más la condición de tal. Parece que el candidato tiene alguna referencia de que hay un mercado de mayor precio para ese tipo de producción de bajos insumos pero también mínimos rendimientos. La pavada provocaría risa, pero en su lugar indigna por la falta de responsabilidad. No existe tal sobreprecio que justifique una productividad del 30% o menos de la que es potencialmente lograble con las tecnologías de última generación. En adición, propio de la prédica populista, condena a los pequeños productores pre determinando que no son aptos para involucrarse en el agro negocio de exportación de aquellos rubros consolidados a partir de la demanda internacional.

Nos preguntamos, ¿A qué productores se refiere? ¿Ganaderos, lecheros, horti-fruticultores? ¿Cuál rubro es ese que se salva con la agroecología? Ni el mismo candidato lo sabe. De hecho en el rubro granjero ya existe hoy un programa potente de producción integrada dónde median protocolos de aplicaciones con el objetivo de minimizar el efecto de los agro-químicos. Por cierto para un rubro cuyo mercado es el interno, salvo algo que se exporta en la producción de frutales de hoja caduca.

En definitiva, las menciones hacia la producción agropecuaria no solo no son de recibo, sino que son absurdas. Solo para el aplauso incondicional en el comité de base y de los izquierdistas urbanos. Entre ellos la Sra. Ministra de Educación y Cultura con sus tremendos prejuicios y resentimiento contra el productor rural.

Los productores rurales, en particular los productores pequeños, los familiares, los más afectados por la crisis de competitividad y el costo país, deberían sentirse indignados ante semejante tomada de pelo.