Correo de los Viernes - La Resaca del Pepe

La Resaca del Pepe

Por Consuelo Pérez

Durante su desempeño como presidente, Mujica no sólo no concretó ninguno de los proyectos que anunció, sino que con sus decisiones incorporó nuevas problemáticas, en franca contradicción con las expectativas generadas.

Es así que una vez retirado del protagonismo que ser presidente le otorgó y del cual se aferró fomentando y regando esa prerrogativa en una actitud mediática al menos inoportuna, sólo nos queda la resaca de sus decisiones inconvenientes, o directamente nefastas.

Sería extensa la lista, y el propio presidente Vázquez, recién asumido, daba cuenta de ese estado de situación, “peor a lo esperado”.

La mala gestión toca a muchos aspectos, y como sabrá el amable lector se refieren a lo económico, a lo social, a lo cultural con la enseñanza como triste ejemplo, y también a lo menos visible que es el manejo de la cuestión pública.

Es así que no se ha podido constatar en los hechos ningún avance con relación a la tan mentada “Reforma del Estado, la madre de las reformas”, y el sentimiento es en general de frustración en lo que a esperanzas depositadas en la misma se refiere.

Para colmo de males, al terminar José Mujica su mandato, el Estado contaba con 33.631 funcionarios más que cuando dejara el cargo Vázquez, que a su vez cerró su quinquenio con un aumento de 27.572 nuevos funcionarios.

Sólo en 2014, y muy sugestivamente, ingresaron 9.384, muchos de ellos el último día viable a tales efectos.

Lejos quedó la promesa de tener un estado eficiente, y de reducir el gasto público en aras de fomentar el crecimiento de los sectores que desesperadamente lo necesitan.
Pudo más el interés partidario y electoral que las reales necesidades del País, y otra vez se nos mintió, y se escondió la mentira.

Y decimos esto porque en ningún momento se dieron explicaciones de este crecimiento y hacia dónde fue dirigido, al menos en forma seria, porque lo hablado por Mujica al respecto es más de lo mismo.

Los datos, disponibles por supuesto, hay que buscarlos, y se puede constatar trágicamente que el crecimiento no es precisamente para contemplar reales necesidades.

Porque sin duda que entendemos perfectamente que la movilidad social y lo que la misma trae aparejado, hace que la plantilla de funcionarios no pueda ser estática, pero debe ser dimensionada con inteligencia, y sobre todo, con responsabilidad.

Es así que seguimos constatando a través de la información que suministran los que están inmersos en el tema, que hay aún un déficit importante de profesores de Secundaria, sobre todo de química, física, matemática e idioma español.

Sabemos que también se necesitan más maestros.

Según las cifras de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) - que son tomadas como base por el Ministerio de Salud Pública - el sistema tiene un déficit de 9.000 licenciados en enfermería.

Nos hemos enterado –lo suponíamos– que Uruguay es uno de los países que, en términos porcentuales, tiene más empleados públicos en América del Sur. Solo estamos detrás de Argentina y Venezuela, y pisándole los talones, pero atentos a lo expresado en el párrafo anterior, Vázquez no tiene previsto bajar su número de aquí al 2020, y deberá incluso aumentarlo.

La inoperancia de la gestión de Mujica toca todos los aspectos, nos golpea día a día, y por supuesto que no hay reconocimiento de ello en él mismo, en su sector político, ni tampoco en muchos de sus votantes, a pesar de que los datos de la realidad son irrefutables, y la actitud se torna entonces irresponsable y suicida, si hablamos de los intereses del País.

En ese sentido, y ante la negación de la realidad, parecería que se aplica por los mencionados el consejo que leímos en un muro montevideano y que rezaba: “Evite la resaca, manténgase borracho”.

No se vislumbra aún la mano firme e idónea que vuela a encaminar las cosas, y la resaca que dejó Mujica sigue inmovilizando aspectos de la gestión...

Desde el Partido Colorado nos mantendremos, como siempre que el País lo necesitó, lúcidos para aportar.