El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha vuelto a reducir su pronóstico de crecimiento para le economía mundial, especialmente por la situación de los llamados “países emergentes”. Señala textualmente el Boletín del FMI: “Ese desempeño inferior a lo previsto se debió al crecimiento decepcionante en las grandes economías de mercados emergentes, la agudización de la recesión de la zona del euro y la lentitud inesperada de la expansión estadounidense.” Entre los emergentes se encuentran, por cierto, los principales clientes de Uruguay: China y Brasil.
 

Ese pronóstico del FMI debería hacer entrar en razones a todos aquellos que en el gobierno insisten en incrementar el gasto público, haciendo gala de una irresponsabilidad galopante. No debe olvidarse que las exportaciones uruguayas sólo crecieron gracias a la soja porque el resto de los rubros experimentó una caída. ¿Quién va a pagar la fiesta cuando el enfriamiento económico afecte la recaudación? ¿Acaso creen que con “más impuestos para los ricos” van a cubrir la brecha (que no será inferior al 2,7%, lo cual de por sí ya es una locura)?
 

Y mire que se les ha avisado...