Quienes hoy tengan más de 50 años, recordarán un muy atractivo juego de mesa, llamado en nuestro país “Monopolio”. El juego consistía en sus orígenes –luego tuvo variantes- en una suerte con dados o cartas a “comprar” desde bienes raíces hasta ferrocarriles. Algunos de ellos, agregaban pequeños papeles impresos simulando dinero con diversos valores. El ganador resultaba aquél que, finalizado el juego, hubiera adquirido más bienes.

Se preguntará el lector ¿Qué tiene que ver ANCAP con un viejo juego de niños? Es que a medida que se van conociendo las desastrosas cifras que presenta el ente, a las que reiteradamente nos hemos referido en esta página, nos crece la sensación que quienes administraron el organismo en los últimos años, los señores Raúl Sendíc y Daniel Martínez, lo tomaron como un juego, o, en palabras más acertadas, jugaron a ser empresarios con dinero ajeno, y, de paso, salir en muchas fotos e inauguraciones, de modo de proyectarse políticamente, lo que se conoce popularmente como trampolín. Lo hicieron, además, en la certeza que jamás serían llamados a responsabilidades, como se haría en cualquier país bajo un gobierno medianamente serio.

A pesar del riesgo de aburrir al lector, daremos algunas cifras, sólo algunas, que creemos ilustrarán sobre la inaceptable irresponsabilidad con la cual actuaron los “jugadores” mencionados.

Como es sabido se trata de un ente monopólico, es decir no tiene competencia, tiene un mercado cautivo al que le vende las naftas, al precio que quiere y de una calidad que se define en nuestra opinión como :”es lo que hay valor”.

La venta de combustibles y derivados, aumentó en los últimos 10 años en 500 millones de litros, lo que significó, obviamente, un enorme incremento de ingresos, pero el ente, dio pérdidas… El pasado año, el precio internacional del petróleo bajó un 40% el ente nos “regaló” una rebaja del 3% y…siguió dando pérdidas. Mientras el precio de la nafta en nuestro país llegaba al record de ser la más cara, no de la región, del mundo.
Una refinería de porte similar a la de la Teja en Estados Unidos, funciona con poco más de 100 empleados, la teja tiene más de 1000, ¡10 veces más! Se explican así, los enormes costos en la refinación de combustibles.

Pero hay más, el área de cemento trabaja a pérdida. Pocos años atrás, los jugadores a empresarios viendo que había posibilidades en el mercado argentino, realizaron entusiasmados costosas inversiones, hoy no hay compradores, no ya que amorticen las inversiónes sino que, como antes, no las justifican. Y si los hubiera las ineficiencias en su producción llevaron a que entre 2013 y 2014 la empresa Cementos del Plata (de Ancap) tuvo que pagar multas por 7 millones de dólares, tanto por no poder cumplir con contratos de venta de cal a empresas brasileñas, cono por la calidad de sus productos,

ALUR - un emprendimiento romántico que produce etanol que vende a la Ancap a un precio que es en realidad un subsidio, ya que está muy por encima de los precios internacionales, pero acorde con el costo desmesurado de su producción.

En definitiva en el año 2012, el patrimonio de la empresa ascendía a 1.151 millones de dólares, en año 2013 bajó a U$S 870 millones y al 31 de diciembre de 2014 descendió a U$S 441 millones. La deuda neta del organismo es al 31 de diciembre de 2014 de U$S 1.250 millones, mientras el endeudamiento financiero a la fecha (no incluye proveedores) alcanza los U$S 1.136 millones, es decir en total más de 5 veces su patrimonio. Si se tratara de una sociedad privada, hace rato que habría cerrado y los responsables de tal debacle estarían respondiendo con sus bienes o presos.

Asimismo, se ha denunciado que se han pagado más de un millón de horas extras, ante ello el Presidente de Ancap Señor José Coya informó que “solo” fueron poco más de 600 mil horas. Lo que nos preguntamos es a ¿cuantos funcionarios?.Porque si nos guiamos por los trascendidos en cuanto a que hay funcionarios que cobraron por 500 horas extras mensuales, los números son asombrosos, por no pensar que nos están tomando el pelo, porque para llegar a las 500 horas extras mensuales por funcionario, cada funcionario debió realizar 18 horas extras por día, más las 6 de trabajo.. En una palabra pasó las 24 horas todos los días del mes dentro de la empresa. Las conclusiones corren por cuenta del lector.

Finalmente, como ciudadanos sostenemos que cada quien puede dedicarse a la actividad, que lo desee siempre que sea legal, ahora, poner al frente de empresas estatales monopólicas a aspirantes a altos cargos públicos, para que jueguen a empresarios con dinero ajeno parece que no da resultado.