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No es una foto, es el cambio
 Cuando lo importante es las fotos, es que la desesperación es muy grande.
Las campañas electorales son una cantera inagotable de sorpresas. El Frente Amplio, en su desesperación, termina haciendo hincapié en que no había una foto de los candidatos de los partidos de la coalición opositora.
Eso fue suficiente, para generar un acto enorme, donde lo menos importante fue la foto, porque eso estaba seguro ya desde antes incluso de suscribir “Compromiso por el País”. El día de la foto se generó en el Molino de Pérez una sinergia política, de unidad en la diversidad, de alegría, de querer crecer, de cambio y de belleza cívica, como hacía mucho que no se veía en el país.
La unidad vino para quedarse, el espíritu de colaboración y el convencimiento que nos necesitamos todos, es una realidad. Eso brotaba de todos los participantes, consolidando la realidad del cambio que marcó el país en las urnas.
La otra “foto”, lo único que muestra es el continuismo: Mujica al Ministerio de Ganadería, Astori a Relaciones Exteriores, Bergara otra vez de Ministro de Economía y Gustavo Leal en seguridad, que es casi lo mismo que volver a nombrar a Bonomi. Todo eso nos recuerda el déficit, más impuestos, aumento exponencial de la inseguridad y mucha opacidad, como todo lo sucedido en torno a Pluna, la regasificadora, Ancap, ASSE, Casinos y un largo rosario de episodios.
Eso y el pensamiento único, no solo en la política sino también en la cultura o en los sindicatos, donde se castiga al diferente.
Estamos viviendo un momento histórico, donde la foto simboliza el cambio y el mandato de la ciudanía de conciliar para poder llevar el país adelante y no hay duda que va a funcionar. Ha primado el deber de responsabilidad frente al discurso maniqueo de buenos y malos.
Hoy la foto somos todos, hoy la foto es Uruguay. |
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