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También internet móvil es un servicio malo y caro

Por Jorge Ciasullo

La ciudadanía es bombardeada constantemente por todos los funcionarios del gobierno promoviendo los supuestos logros del “país de primera”. Pero la realidad es otra. Por eso es bueno interiorizarse de informes basados en estudios independientes, como los organismos internacionales y otros actores no “compañeros”, que nos permiten ubicarnos en la realidad que vivimos.

Un informe reciente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), establece que la calidad de “bajada” de internet a los celulares es:“limitada, de mala calidad y cara”. El informe, basa sus conclusiones en la comparación de la velocidad con la que se descarga la información de internet en los teléfonos celulares. Así, en el año 2016, la velocidad media de conexión – según datos de proveedores de servicios de contenidos digitales- en América Latina fue de 3,87 Mbps, en los países de la OCDE alcanzó los 10,84, mientras en Uruguay fue de 0,5.

Esta baja velocidad apareja saturación, lo que en ciertos horarios, impide totalmente la conexión a teléfonos celulares, hecho que ha motivado quejas de turistas particularmente en Punta del Este, sumándose a otros servicios de pésima calidad como los cajeros automáticos en todos los balnearios de la costa.

Consultado por periodistas el presidente de la Ursec, Gabriel Lombide, manifestó que: “aún sin conocer en profundidad los datos, lo publicado por el BID parece falaz”. Como ciudadanos nos gustaría que el señor Lombide, que ha descalificado el informe del BID, agregara a su adjetivación argumentos que la sostengan, de otro modo estamos en la línea de la Ing. Carolina Cose, cuyos anuncios antes en Antel sobre el tema y ahora sobre distintas materias en el Ministerio de Industria, como el hallazgo de petróleo para explotar en nuestro territorio, no pasan de ser un batido de parche que más temprano que tarde, los hechos, ahora sí, demuestran que son falaces.

Lo anterior en relación a lo “limitado, malo y caro”, va de la mano con el costo de vida en nuestro país. En efecto, según el índice de Paridad de Poder Adquisitivo (Global Petrol Prices), Uruguay es el país más caro de la región.

 Lleva a nuestro país a esa posición de “privilegio”, entre otros indicadores, el precio de los combustibles, que nos ubica como los más caros a nivel regional y a la posición 17 en el mundo.
Lo más grave es que si en el año 2017, Uruguay hubiera importado los combustibles ya refinados, en lugar de procesarlos en La Teja, los consumidores hubieramos ahorrado 450 millones de dólares, según información de El Observador del dos de febrero último. Algo similar ocurre en 2016 donde el total ahorrado por combustibles hubiera sido de US$ 418 millones. La serie histórica también deja ver que en el promedio anual de precios, la importación de combustibles resultaría más barata que refinar en Uruguay hasta 2006 inclusive, es decir en los últimos 11 años.

En definitiva, los uruguayos tenemos un país de primera, en cuanto a costo de vida, impuestos y costos internos pero de nivel africano en relación a los servicios que en contrapartida recibe.
Correo de los Viernes.
Publicación Oficial de la Secretaría de Prensa del Foro Batllista.