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De nunca terminar
 Las denuncias sobre Asse se siguen multiplicando. Para peor, los jerarcas reconocen haber autorizado las irregularidades...
El gerente general de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Richard Millán, confirmó en el Parlamento que el ex director del Hospital de Bella Unión, Marcos García, contrató a una emergencia móvil de la que él era accionista cuando estaba al frente de ese centro. "Es cierto que Marcos García estuvo (en los dos lugares), pero se excusó; las autoridades lo avalaron y él no se escondió", afirmó Millán, en una explicación absolutamente inaceptable. El funcionario cometió una falta grave pero como avisó –miren que voy a cometer algo prohibido pero como “aviso no traiciono”– los jerarcas de Asse miraron para el costado...
El asunto es realmente inconcebible.
La empresa empezó a brindar servicios en marzo de 2013 al hospital pero García recién vendió sus acciones en la compañía Siemm en junio, por lo que durante cuatro meses se contrató a sí mismo.
Cuando el exdirector vendió sus acciones, el Hospital de Bella Unión abrió una licitación para contratar a un servicio de traslados y Siemm resultó elegida. Sin embargo, ya se la había contratado por compra directa en marzo. García argumentó que se desvinculó para hacerlo todo "con transparencia y honradez". Una honradez bárbara...
Las irregularidades se han dado en casi todos los hospitales del interior. En Rivera, donde el director del nosocomio fue destituido por hacer contrataciones ilegales, los médicos están pagando las consecuencias de los desarreglos: hace meses que no cobran y Asse no tiene recursos financieros para enfrentar sus responsabilidades. Es decir, las contrataciones sin respaldo legal tampoco tenían respaldo financiero, por lo que los médicos están ahora realizando paros y discontinuando los servicios como expresión de protesta.
Ilegalidades, clientelismo, amiguismo... La gestión del Frente Amplio hace agua por todos lados. |
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