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Áreas verdes transformadas en fuente de recaudación

Por Jorge Ciasullo

Cuando en el mundo se busca dotar a las ciudades de más y mejores áreas verdes, el Municipio de Montevideo las elimina, con el único objetivo de recaudar, construyendo edificios que generarán contribución inmobiliaria e impuestos, sin tener en consideración ninguna otra alternativa.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo recomendable para crear un buen medio ambiente en un territorio, es que haya una superficie de 9 metros cuadrados por cada habitante, no sabemos cuál es la situación actual en Montevideo, lo que sí sabemos, es que el Municipio en su afán recaudador, destruye día a día áreas verdes que, pioneros desarrollaron hace más de 50 años, hoy condenadas a desaparecer.

Nadie discute que la educación y el empleo, son fundamentales para el desarrollo de un país, pero tampoco se discute que la formación y desarrollo de un medio ambiente adecuado, mejora la calidad de vida de la gente, contribuye a la salud de la población y ayuda a la socialización de los vecinos. Para lograr ese medio ambiente, juega un papel fundamental, la existencia de áreas verdes para uso público, con juegos para niños, sendas para caminantes y bicicletas etc.

Quien se tome el trabajo de observar, en Carrasco Norte (Google Maps), entre las calles General Santander y Orleans, verá que existió un área verde, poblada de pinos y eucaliptos que abarcaba 7 manzanas en línea recta, de ellas, dos fueron cedidas a un colegio que las transformó en campos deportivos , restando consecuentemente 5 . En el año 2007 se desafectó, como área verde, una manzana de aproximadamente 90 metros por cuadra, comprendida entre las calles Bachini, Baetghen, Antonio Pena y César Miranda.

Luego, la negoció por canje, recibiendo a cambio el edificio del ex Bazar Mitre (Av.18 de Julio 885), en principio destinado a: Museo de las Migraciones y luego en el Centro de la Fotografía de Montevideo ( CdF).

Según los inversores, el proyecto “Verdenia” (en construcción) constará de dos edificios de 32 unidades cada una, de 1 a 4 dormitorios y cuyo precio oscila entre los 160 y 650 mil dólares, más 17mil adicionales, si se desea garaje.

En una palabra amigo lector, habrá 64 nuevas contribuciones inmobiliarias e impuestos, objetivo excluyente de las administraciones del FA. Por supuesto, nadie ha estudiado el impacto ambiental que significará para la zona, el movimiento de automóviles, medios de transporte y proveedores, en calles por demás angostas. Y lo peor, es que no dudamos que el mismo destino correrán los parques aún existentes en ésta y otras zonas de Montevideo.

No dudamos de la importancia del Centro de Fotografía, pero tampoco desconocemos los cientos de edificios de propiedad municipal deshabitados y abandonados, que podrían adecuarse y recuperarse para darles destinos similares al que anteriormente describimos.

No podemos dejar de alarmarnos ante estas acciones depredadoras, que cambian la fisonomía de un barrio completamente distinto a quienes en él años atrás, invirtieron y viven, entre otras cosas, atraídos por su entorno natural que, paso a paso la intendencia destruye, para hacer caja y que agravará los problemas hoy existentes y fácilmente comprobables, de limpieza, mantenimiento, iluminación, seguridad y barrido de calles, pero eso no es prioritario para la IMM.
Correo de los Viernes.
Publicación Oficial de la Secretaría de Prensa del Foro Batllista.