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Señalan daño de la marihuana en niños y adolescentes

Pediatras advierten sobre los daños que provoca el consumo de marihuana en niños y adolescentes; “cannabis no debe usarse como medicamento”. Anep debe instrumentar políticas educativas para la prevención del uso problemático de la marihuana. Nuevas realidades en torno a la legalización de una droga promovida improvisadamente.

La extraña idea del ex presidente José Mujica de legalizar el cannabis sigue, desde hace casi cuatro años, rodeada de insólitos episodios y extremos llenos de contradicciones y confusiones, que han formado una espesa y metálica telaraña imposible de esclarecer.

Hoy existen, según datos oficiales, 6.641 autocultivadores (con seis plantas autorizadas cada uno), 51 clubes cannábicos habilitados y algo más de 3.000 personas registradas en Correos, que en pocas semanas podrán adquirir la hierba en algunas farmacias.

Pero nada es tan fácil. Todo este formidable enredo fue concebido por Mujica para combatir el narcotráfico. Es decir, ha creado algo malo para combatir algo malo. Pero datos concretos señalan que el consumo de drogas aumentó en los últimos años. ¿Acaso las redes delictivas abandonarán de pronto el negocio?

Asimismo, el propósito oficial es establecer la venta legal de cannabis en farmacias. Sin embargo, la publicidad del gobierno recomienda renunciar al consumo de marihuana.

En los últimos días han surgido otros aspectos que giran en torno a este tema.

Sociedades científicas de pediatras afirmaron que la marihuana “no debe usarse como medicamento”. El uso medicinal “de derivados del cannabis en pediatría se encuentra en proceso de investigación y debe ser regulado con el mismo rigor cientifico que otros productos farmacológicos”.

Los pediatras de la región – según “El Observador”- reiteraron los daños que puede provocar el consumo de marihuana en adolescentes y niños. Por ejemplo, consecuencias negativas en el aprendizaje, deserción estudiantil, deterioro de la salud mental.

También expresaron que los daños asociados al consumo de marihuana se producen con mayor frecuencia en niños y adolescentes que viven en situación de pobreza.

En ámbitos parlamentarios se ha denunciado que la ley que regula el mercado de marihuana establece la creación de políticas educativas que todavía “no se ha cumplido”. Estas políticas deben referirse a la prevención del uso problemático de cannabis.

Las campañas deben determinarse en Primaria, Secundaria y Educación Técnico Profesional. Anep deberá instrumentar las formas de esas políticas.

Además, inspectores del Ministerio de Salud Pública deben fiscalizar que los comercios tengan ocultos productos vinculados al consumo de tabaco. Pero un decreto de 2014 –dicen comerciantes- nada regula respecto a productos relacionados con la marihuana.

Sin embargo, vendedores de productos cannábicos han protestado (“El Observador”) por un control “indebido” sobre esos productos, incluso con amenazas de sanciones.

Aunque parezca otra cosa, aun falta mucho. El gobierno camina lentamente, estirando los plazos. El presidente Tabaré Vázquez siente escozores con la aplicación de la normativa cannábica, que le corre a contramano. Se multiplican las inconsistencias, mientras Mujica contempla, desinteresado, otro fracaso de sus emprendimientos.
Correo de los Viernes.
Publicación Oficial de la Secretaría de Prensa del Foro Batllista.