El 13 de septiembre de 2002, se inauguró una nueva época de Correo de los Viernes, un semanario fundado originalmente en 1981 por el Dr. Julio María Sanguinetti. Han pasado ya 20 años desde esos primeros pasos en versión digital. Años de múltiples transformaciones en los que hemos sido testigos y actores de grandes cambios.
"El nuevo Correo de los Viernes no es de papel ni transmite ese olor de tinta fresca tan grato a todos los que, hace ya mucho tiempo, abrazamos el noble oficio de informar, opinar e interpretar la realidad a través de la prensa. Nuestra nueva publicación se presenta en el monitor de una computadora y sólo se materializará en papel cuando alguno de sus lectores así lo disponga, utilizando la impresora de su propio computador...", decía en septiembre de 2002 un breve suelto que anunciaba la nueva época de Correo.
Desde entonces, mucha agua ha corrido debajo del puente. Naturalmente, los 20 años de Correo nos trasladan, en primer lugar, a la crisis de 2002. Esa que tan cara pagamos los colorados, pero de la que salimos sin quebrar la noble tradición nacional de honrar los compromisos asumidos. No hubo declaración de "default", como reclamaba la mayoría frentista y el FMI, y el país se entregó creciendo a una tasa de 4.6 %.
Hoy, 20 años después, seguimos pagando las consecuencias político-electorales de aquella crisis, pero transitamos la vida pública con la tranquilidad de haber puesto al país de pie. Como reconoce recién ahora la izquierda local, el ciclo frenteamplista disfrutó los beneficios de esa "actitud responsable" -como la definió el propio Mujica- que tuvo nuestra dirigencia para con el país. También de los grandes proyectos colorados, como la forestación y las zonas francas.
Con esa misma responsabilidad, nuestro Partido propuso y logró concretar el surgimiento de una coalición republicana como alternativa al agotado proyecto frenteamplista. Lo que entonces fue una idea personal del actual Secretario General del Partido Colorado, el ex Presidente Sanguinetti, hoy forma parte de una realidad política que, guste o no, llegó para quedarse.
En esa coalición estamos desde 2020, cuando retornamos al gobierno para superar otra gran crisis, la de la pandemia, con el mismo sentido de responsabilidad. El mundo de hoy es muy distinto. Como ha insistido en estas páginas el Dr. Sanguinetti, el pasaje de la economía industrial a la digital es rotundo. Ha cambiado el concepto de riqueza y la forma en la que nos comunicamos.
El mundo asiste a otra puja universal, entre China y los Estados Unidos, pero también a los arrebatos nostálgicos de Putin, que ha embarcado a Europa nuevamente en una guerra. Los populismos autoritarios pululan en nuestra América (también en Europa), poniendo en jaque a la democracia, mientras se mantiene, como un dinosaurio, el régimen cubano, una suerte de monarquía absoluta.
Alejados de todo voluntarismo y con la mirada puesta en el porvenir, seguiremos defendiendo las ideas de libertad y justicia.