Por Daniel Torena
La Batalla final entre fuerzas argentinas y británicas transcurrió en Wireless Ridge, una colina ubicada a pocos kilómetros de Puerto Argentino o Stanley, capital del Archipiélago, en una gélida noche del 13 al 14 de junio de 1982.
Los argentinos habían desembarcado el 2 de abril, luego de venir reclamando la soberanía sobre las Islas Malvinas desde hacía 150 años.
En esta Guerra, que duró 73 días, murieron muchos jóvenes combatientes.
El recuerdo más triste para los argentinos fue el hundimiento del "Crucero General Belgrano", atacado fuera de la zona de exclusión por el submarino nuclear británico "Conqueror". Aquel trágico 2 de mayo perdieron la vida muchos marinos, la mayoría del total de bajas que tuvo Argentina durante la Guerra, unos 649 fallecidos.
Los británicos perdieron unos 255 hombres, la mayoría tripulantes de fragatas y naves de apoyo hundidas o muy seriamente averiadas por la extraordinaria actuación de la Fuerza Aérea y la Aviación Naval Argentina, qué atacando con bombas y misiles "exocet" franceses con gran maestría y coraje hundieron naves muy modernas en esa época.
También perdieron la vida tres isleños civiles.
La superioridad de armamento del Reino Unido fue determinante, así como lo fue el apoyo logístico de inteligencia satelital de los Estados Unidos y de Chile, también en aspectos logísticos.
Tuve el honor de tener dos amigos combatientes argentinos qué sobrevivieron a los ataques británicos de bombardeos de aviones Harriet y de misiles tirados por naves de guerra contra blancos argentinos, qué no tenían casi defensa alguna. Uno fue Infante de Marina y el otro piloto de helicópteros de la Fuerza Aérea.
Sus relatos y su amor por lo que defendían, me llegó profundamente, más allá de conocer bien la Historia de las Islas Malvinas por mi profesión.
El Uruguay siempre ha reconocido los Derechos de la República Argentina sobre la soberanía sobre Las Islas Malvinas, por encima de tener también derechos históricos, por haber dependido las Islas Malvinas y Regiones Australes de la "Capitanía General de Puertos de Montevideo" o del "Apostadero Naval" en tiempos de la Colonia, por Real Cédula del Rey Carlos III del Reino de España e Indias, a fines del siglo XVIII
Luego reafirmada por la Real Orden de San Ildefonso del 9 de agosto de 1776, al estar verificada la evacuación de los ingleses de las Islas, tomadas militarmente por la Real Armada Española, a la soberanía del Reino de España e Indias.
Pensamos que la salida a la soberanía de Las Islas Malvinas es sólo mediante la solución diplomática y no militar.
Finalizo esta columna con mi más profundo respeto y admiración, tanto por los combatientes argentinos como por los británicos, así como por los isleños víctimas de una Guerra ajena a ellos.