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Los "jóvenes con hambre": otra desmemoria frenteamplista

A raíz de una crónica periodista que, en base a fuentes anónimas, asegura se han registrado "desmayos de liceales con hambre" en Montevideo, dirigentes frenteamplistas han vuelto a agitar los fantasmas del "recorte". Lo que no dicen es que en sus gobiernos hubo casos comprobados, denunciados por los propios docentes -no anónimos-, de mal rendimiento liceal por hambre de los alumnos.

En la edición anterior de Correo, analizábamos el relato que ha venido construyendo la izquierda sobre un supuesto recorte en alimentación escolar. Hace una semana, el Presidente del Codicen, Robert Silva, y organizaciones barriales, particularmente Casavalle de a Pie, tuvieron que salir a desmentir -con evidencia- a una legisladora frentista que recorrió los medios de comunicación diciendo que en Casavalle los comercios tenían que hacer donaciones porque a los niños "solo les daba leche".

"Muchos nos han preguntado si esto es verdad. Efectuamos un sondeo preguntando a niños, vecinos y maestros y podemos decir sin temor a equivocarnos que la información no es ni precisa ni certera [...] Leche sola no se le da a nadie, la norma es con cocoa, con vainilla o con café, dependiendo del día. Y pan solo tampoco es la norma, varias según el día entre pan con queso untable, dulce de membrillo o de leche, pan saborizado, scones de queso, galletas de avena o frutas", explicaron desde Casavalle de a Pie, a quien nadie podrá acusar de ser afín a este gobierno.

Casi en paralelo a los dichos de la diputada, con gran repercusión entre los fanáticos frenteamplistas, el Semanario Brecha publicó una crónica en base a fuentes anónimas -los supuestos docentes pidieron no ser citados por sus nombres reales- narra situaciones de "desvanecimiento por hambre" en varios liceos de la zona noroeste de la capital. Según la nota, los adolescentes tienen pudor por confesar el tema, que todos los días "se descompone alguno", por desmayo, bajón de azúcar o de presión arterial. De acuerdo a uno de los docentes anónimos, el liceo en el que él trabaja llegó a un "récord de llamadas a la emergencia".

Como era de esperarse, medios de prensa afines a la oposición se hicieron eco de esta nota, replicándola con malicia. Lo mismo hicieron varios legisladores frenteamplistas y cientos de militantes en redes sociales, donde suelen destilar odio y generar el "relato".

Lo que no dicen los desmemoriados es que, durante sus gobiernos, específicamente en 2015, hubo denuncias certeras -no anónimas e incomprobables- respecto al mal rendimiento liceal por hambre de los alumnos. Lo denunciaron docentes, sindicalistas y lo reconocieron las propias autoridades del Ministerio de Educación y Cultura de la época.

La crónica a la que nos referimos fue publicada en mayo de 2015, hace exactamente siete años. "Estudiar con hambre; docentes lanzan alerta" se titulaba la nota que todavía el lector puede revisar en la web.

Los profesores del liceo de Parque del Plata, con nombre y apellido, denunciaban que los alumnos de dicha institución tenían muy bajo rendimiento porque sufrían hambre. En paralelo, el sindicato de profesores sostenía también que eso ocurría en Montevideo y en Canelones. Si, en 2015, con un país que había recibido los beneficios de un más de un decenio de crecimiento económico, había hambre.

En el liceo mencionado, que en ese entonces tenía 300 alumnos, los profesores advertían que por lo menos 100 alumnos necesitaban algún tipo de ayuda extra para alimentarse. Muchos de estos llegan a las aulas con hambre. "Sí, con hambre", dijo y reafirmó la entonces coordinadora pedagógica, profesora de geografía y representante del colectivo docente del liceo Parque del Plata, Ana Píriz.

"No desayunan, no almuerzan, no comen en todo el día. En la zona hay una escuela de tiempo completo en la que les dan de comer, pero cuando pasan al liceo ya no tienen este beneficio. Hay una docente que viene con un tupper todos los días", explicó la profesora a El País.

"Hay gurises que te dicen tengo hambre. Otros no lo dicen porque les da vergüenza. Si la panza no está llena, no se puede aprender. Todo bien con el derecho a la educación, pero también está el derecho a tener las necesidades básicas satisfechas", complementó la docente.

"Esto pasa todos los años, pero este lo estamos viendo más. Mucho más. La situación de vulnerabilidad económica está muy marcada", finalizó Píriz.

En esa misma crónica periodística, también se recogen declaraciones muy ilustrativas de la situación, realizadas por el entonces dirigente de la Asociación de Docentes de Educación Secundaria, Luis Martínez. "...todavía sigue habiendo gurises que llegan a estudiar mal alimentados; pasa en varios barrios de la capital", advirtiendo que las zonas periféricas de Montevideo son "las más afectadas". "Si hay 600.000 uruguayos que ganan menos de 15.000 pesos por mes estas cosas van a pasar", se quejó Martínez.

Las cifras manejadas por Martínez en la entrevista de 2015 provienen del Instituto Cuesta Duarte del Pit-Cnt, que advertían que, en 2014, 690.000 trabajadores ganaron menos de 15.000 pesos, y que la cantidad representa al 41,5% de ocupados.

¿Aquí es donde dice Fernando Pereira que quiere volver la mayoría de los uruguayos? ¿A esta panacea socialista? ¿Dónde estaban en 2015 los alarmistas de hoy, que en ese momento pertenecían al gobierno?

En fin, otra desmemoria frenteamplista...

Correo de los Viernes.
Publicación Oficial de la Secretaría de Prensa del Foro Batllista.