| ceviro | 24.2.2018 / 10:28 | |
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| Jamás entenderé que se anteponga un eventual interés político al sentido común.No veo porqué no puede compatibilizarse el uno con el otro.En el caso de la seguridad y en función de los malos resultados de las políticas aplicadas se necesitaría un cambio total,incluído la sustitución de un ministro que fue impuesto en el cargo con,entre otros, el triste antecedente que se le atribuye de haber asesinado a un policía por la espalda.¿Era necesario tener a este sujeto ni más ni menos que al frente de la seguridad pública? La falta de sentido común primó desde el primer momento. Nunca reconoció públicamente su pasado; menos naturalmente se disculpó. Por tanto no sorprende que no asuma fracasos y hasta que responsabilice a las víctimas. Desde ese punto de partida los resultados son los que son. | |
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