vazquez y ordoñez15.8.2014 / 19:1
suscribo en un todo a William y a Gus. este articulo no sirve para nada. solo disgrega. el norte es sacar al FA, el resto son discusiones de familia. y si miran mi nick, veran que siendo colorado , desde 1836, Carpinteria, no sere yo quien deje de defender al batllismo
 
kike15.8.2014 / 18:51
El ex pichón de cura olvida a sus hermanos pederastas, a los del Banco Ambrosiano, la logia Pdue, etc etc a todos los que Benedicto XVI ha protegido y encubierto. Esa moralinga hace daño domingo a domingo o cuando ud como ministro sacó la ley que permite descontar de impuestos las donaciones a la Universidad de Montevideo (Opus) a la Católica, a la ONG Niños con Alas (la suya) oh casualidad ehhhh y podemos seguir con la lista.
 
Tincho15.8.2014 / 17:56
A cada chancho le llega su San Martín. Y este engominado blanco no es la excepción. Coincido con mis predecesores en que el foco electoral pasa por otro lado, pero tampoco la pavada. Hay un tema de dignidad que no debe dejarse avasallar por más que una elección nos haga circunstancialmente coincidir en el hecho de aunar esfuerzos por darle al País una alternancia tan necesaria como imprescindible por la buena salud del mismo. Muy bueno el artículo, no necesitamos Filósofos de cafetería de Facultad. Ya con el de boliche (Mujica) tenemos cerrada la cuota.
 
norillavi15.8.2014 / 17:8
Confieso que se poco del batllismo,pero si se que hubo dentro del batllismo una cultura estatista,que en algun momento el ex-presidente Sanguinetti se enbandero con ella.Recuerdan el plebiscito de Antel y su famosa frase"Las joyas de la abuela".Tambien recuerdo una vez que una correligionaria en una reunion de nuestro club,dijo ,refiriendose a una actividad lucrativa,que eso era "comercio"o sea una actividad poco menos que deleznable.No se si eso nacio con el batllismo.Si se que aquellos polvos trajeron esos lodos donde hoy estamos sumidos.
 
Gus15.8.2014 / 16:42
Independientemente del contenido del artículo, de sí esta equivocado o no, creo que no es el momento para entrar en estas disquisiciones, que distraen del objetivo principal que esta cercano. Los demócratas, aunque naturalmente discrepemos, tenemos que estar más unidos que nunca, para sacar a esta gente. Otro periodo más, destruirá los pocos valores que aún permanecen.Gus.
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