Correo de los Viernes - Un “perro” que ladra mucho, pero también muerde

Un “perro” que ladra mucho, pero también muerde

Por Adolfo Castells Mendívil

La semana anterior, Correo de los Viernes en “La seguridad según “El Perro” se ocupó de las declaraciones del Subsecretario del Interior, Jorge Vázquez Rosas, que acababa de recomendar a las personas, andar con poco dinero para evitar ser víctimas de robos y sobre el exabrupto: “Si no están vinculados a la delincuencia, narcotráfico y carecen de problemas familiares importantes, tengan la seguridad de que nadie los va a matar".

Sin perjuicio de lo ya expresado en esa nota, quiero agregar que, primero, es totalmente falso ya que no se evita el robo por andar con poco dinero, simplemente se evita que le roben más plata. Y segundo, porque vaya manera de proteger a la población, con esa recomendación. Es como decirle, evite el arrebato, no salga de su casa. O evite la rotura del vidrio y la rapiña, deje el auto en el garaje y viaje en bicicleta. O evite la punga en un ómnibus, tome un taxi.

Y con respecto al “nadie los va a matar”, es el colmo: la víctima pasa a ser el culpable. Si a usted lo matan por algo será, mi amigo, no se la agarre con el Ministerio del Interior. Ministerio, por otra parte, cada vez más ineficiente, como lo demuestran el récord histórico de 16.686 rapiñas, en 2013. Y de los 260 homicidios, las muertes en el marco de rapiñas, copamientos y hurtos representan el 23%, contra el 29% que son ajustes de cuentas y las vinculadas con el tráfico de estupefacientes (crimen organizado) representaban apenas el 3,1%.

Pero el Subsecretario del Interior, nos tiene acostumbrados a sus disparates —como los anteriores— atropellos e incoherencias. Entre los atropellos, recordemos el cometido con la Jueza Fanny Canessa, que tenía —entre otras causas— las de Nin Novoa, Casinos Municipales de Juan Carlos Bengoa (con posibles implicancias de Mariano Arana y de María Julia Muñoz). Y la de Gualberto Pérez Riestra, el procurador del Estado en lo Contencioso-Administrativo, acusado por una maniobra de fraude contra la Fundación Peluffo Giguens. Todos ellos conspicuos y notorios frenteamplistas.

En esos días, un recluso del Centro Nacional de Rehabilitación (CNR), fue asfixiado mientras dormía y luego colgado para simular un suicidio, por cuyo caso la fiscal Beatriz Scapusio pidió el procesamiento de la directora del instituto penitenciario, Diana Noy (conspicua y notoria frenteamplista), al concluir que no tomó las medidas dispuestas judicialmente para proteger al interno y por el delito de "homicidio por omisión impropia a título de culpa".

Jorge Vázquez, entonces a cargo de la cartera del Interior, denunció a Canessa ante la Suprema Corte de Justicia y a Scapusio ante el Ministerio de Educación por “malos tratos y presionar” a la directora del Centro Nacional de Rehabilitación, su correligionaria Diana Noy.

No se conocen antecedentes de casos en trámite judicial, en los que el Poder Ejecutivo haya denunciado a los magistrados. Fue una primicia del Frente Amplio y de ese mismo Subsecretario, el que había declarado que un procesado sin sentencia firme es culpable, ignorando la presunción de inocencia y presionando a la Justicia.

Y entre las incoherencias del “Perro” Vázquez memoremos una flor: cuando se manifestó en contra de la legalización de la venta de marihuana en una reunión realizada con diputados del Frente Amplio, que trabajaban en la regulación de la venta de la sustancia.

No obstante lo cual, y pese a que indicó que se debía seguir con la estrategia integral de drogas aplicada en el gobierno de su hermano, Tabaré Vázquez, y oponerse al proyecto que va había sido votado en Diputados, no se inmutó más allá de eso y se atornilló al sillón de Subsecretario.

Sin embargo, sus últimas declaraciones no se agotan con lo arriba mencionado, porque reincidió, en primera instancia, queriendo aclarar el exabrupto y lo oscureció y luego agregó otra perla al collar de “El Perro”:

"Estos hechos hay que estudiarlos en profundidad. Es sospechoso que después de pasado el Mundial de fútbol y cuando se reinician las campañas electorales empiecen hechos vandálicos en las escuelas. Hace mucho tiempo que no se daban. Cuando más de un hecho coincide en el tiempo hay que preguntarse qué está pasando", dijo. Consultado sobre si el vandalismo era un hecho político, dijo: "No todo es producto de la casualidad".

Estas “nauseabundas” expresiones —como las califica Eugenio Baroffio Abadie— no son de extrañar viniendo de quién vienen y “produce asco que se empañe la campaña electoral, en sus inicios, con esa actitud de desdén para con la opinión pública e injuriosa diatriba contra los partidos de oposición. Deslizar que en la quema de una escuela pueda haber incidido una intención tan espuria es repugnante.”

Ahora bien, algo hay que reconocerle a Jorge Vázquez y es su experiencia en el delito (como, por otra parte, la de su Ministro Eduardo Bonomi). Bien lo ilustra Sergio Molaguero, en su libro “Conocer la verdad. La historia de mi secuestro”, en que narra los 69 días de 1972 en que estuvo detenido por la Organización Popular Revolucionaria 33 Orientales (OPR 33), atado de pies y manos, golpeado y con inyecciones de drogas.

Sostiene Molaguero que Jorge Luis Vázquez Rosas, ex integrante de la OPR-33 y hermano del actual candidato del Frente Amplio, dirigió el comando que lo secuestró, el operativo “Marcelo” que era el alias de Vázquez y constituía un grupo de 10 personas.

Antes de editar el libro —según comentó a El País— Molaguero solicitó a Jorge Vázquez que aportara su versión de los hechos, pero no tuvo respuesta. Fue secuestrado el 11 de mayo de 1972 con 23 años, cumplió los 24 cautivo en un aljibe. Su liberación fue el 19 de julio. Mientras que Vázquez fue capturado 11 días después de liberado Molaguero y condenado por la Justicia Militar a cumplir 16 años de prisión. Fue liberado con la ley de amnistía de 1985.

Como que, contrariando al refrán “El Perro” ladra pero, además, muerde. ¡Y de qué forma!