Correo de los Viernes - "La unidad es el comienzo"

"La unidad es el comienzo"

Por Francisco Berchesi

Sigue habiendo sectores sociales y políticos que promueven el enfrentamiento en vez de los consensos.

Intentaré analizar y contraponer las teorías de conflicto con las teorías de consenso, demostrando las raíces e intenciones de algunos discursos políticos de la campaña actual.

Quizás el contraponerlas pueda verse como un conflicto en sí mismo, pero simplemente es para resaltar el rumbo que creo conveniente tome esta sociedad. Personalmente, creo que la división y tensión social ya nos llevó a períodos oscuros, debilitando instituciones, cuando no atacándolas, a éstas y a la democracia.

Si queremos el progreso de nuestra nación, no apoyemos discursos e ideologías de división. El concepto de nación en sí mismo lo expresa: "...comparten vínculos históricos, culturales (...) y tienen conciencia de pertenecer a un mismo pueblo o comunidad."

Las teorías del conflicto se basan en los trabajos realizados por Karl Marx, quien visualizó en la lucha de las clases sociales la principal herramienta para el cambio. La misma se debía llevar entre la burguesía y el proletariado. Aquella con el control de los medios de producción y dominador de la propiedad privada, y éstos, mayoritarios, venden su fuerza de trabajo a la burguesía y vive en la pobreza debido a la explotación. Esta "situación deshumanizadora" lleva a la alienación y a una conciencia de grupo que busca el bien colectivo de su propia clase.

En el año 2016, Luis Lacalle Herrera, durante la presentación de un libro menciona algo de preponderante importancia, pasando desapercibido para muchos. Dijo que la guerra civil española se da en un momento en el que la sociedad hablaba de "nosotros" y "ellos".

Actualmente, desde el oficialismo y su militancia se pregonan discursos conflictivos. Su candidata a la vicepresidencia habla de dar "la peor de las batallas" entre la "oligarquía y el pueblo". Y fíjense que curioso, quienes se jactan de ser el partido de la igualdad, social y de género, son quienes viven en una realidad paralela. Estamos en democracia, ¿de qué batalla está hablando? ¿Por qué quieren acentuar la división social?

Todo tiene sus raíces, no son sólo libros empolvados, o algunos locos que les gusta la historia. El conocimiento permite darnos cuenta de este tipo de cosas. La historia es enseñanza. Citando a Tito Livio, "el conocimiento de la historia enseña al individuo y a la nación a asumir lo imitable y evitar lo vergonzoso."

La teoría del consenso como medio para alcanzar la verdad tiene su origen en Sócrates y ha sido desarrollada en el siglo XX por Apel y Habermas. Destaca la importancia del diálogo como el mejor de los procedimientos para descubrir la verdad. De un diálogo libre, limpio de coacción y de intereses. Su principal aportación consiste en mostrar que la mejor forma de acceder a la verdad es aducir razones propias, escuchar las ajenas y dialogar con rigor y serenidad. Existimos gracias a que convivimos con los semejantes, con los iguales. Y la convivencia se vive en el dialogo y por el dialogo.

Por parte de la "oposición" se escuchan discursos de unidad. En el Partido Colorado, tuve la oportunidad de escuchar discursos de Robert Silva pidiendo respeto para con el que piensa distinto. En un evento de 150 jóvenes en el que se nos presentaba a nuestro candidato a la vicepresidencia, hizo especial énfasis, enseñándonos, que debemos respetar la opinión de quien piensa distinto y a partir de ahí tratar de convencer, siempre con entendimiento y diálogo. Lo hizo nuevamente en la gran "Convención del resurgimiento", como así la llamara el Dr. Sanguinetti.

Desde el partido nacional, Beatríz Argimón, su candidata a vicepresidente, pregona lo mismo: no incentivar la división social, sino al contrario, comenzar a sanarla.

No sigamos corrientes de conflicto, supimos ser una gran nación. Tal es así, que en abril de 1925 Albert Einstein residió una semana en nuestro territorio y escribió en su diario: "Esta gente hace pensar en los Suizos y en los Holandeses. Modestos y naturales. Que el diablo se lleve a los grandes estados con sus obsesiones."

En mi artículo anterior, hablé de la "ética de los ciudadanos", tema muy relacionado con el actual. Es que la unidad es la base de todo cambio que queramos hacer. Juego al rugby que es un deporte en equipo y créanme que a un equipo dividido no le va nada bien. No cumple sus objetivos si hay quienes lo dividen internamente, si hay quienes no creen en su potencial, si hay quienes no ven la fuerza de la unidad, la fuerza de la armonía. Por eso la unidad es un comienzo, y sobretodo un medio.