Correo de los Viernes - La estupidez ideológica llegó a la Oea

La estupidez ideológica llegó a la Oea

La Organización de Estados Americanos, OEA, es uno de los tantos organismos internacionales perfectamente inútiles, de esos que van atrás de los conflictos generados por la torpezas de los países grandes o de las revueltas violentistas de los grupos de izquierda que se dedican, por razones ideológicas, a atacar al “ imperio”.

La izquierda vernácula festeja como una victoria propia que el ex Canciller Luis Almagro haya sido designado Secretario General de la Oea, pero dudamos que pueda desarrollar alguna acción concreta y eficiente en beneficio de los países americanos.

Sus declaraciones iniciales al semanario Búsqueda de ayer –cuyo vínculo digital no podemos reproducir porque corresponde sólo a suscriptores– confirman que luego de obtenidos los votos de los miembros de la Oea, incluso Estados Unidos, el señor Almagro mantiene su signo ideológico, correspondiente al izquierdismo estúpido.

Primero; defendió a Cuba, al sostener que “Cuba tiene sentimientos que han sido heridos muy fuerte por la organización –se refiere a la Oea– durante mucho tiempo”. Es decir, según el novel secretario general de la Oea, las intervenciones armadas de Cuba en todo el territorio latinoamericano –que no mencionó en su intervención– llevándose por delante el famoso principio de “no intervención”, ícono sagrado para la izquierda, no existen. Aparentemente la Oea tiene que pedirle disculpas a Cuba por haberla expulsado, con razón, porque exportó la guerrilla a toda América Latina, pero Cuba no tiene que pedir perdón a los países americanos por exportar su fracasada, recontra fracasada y sangrienta revolución. El mundo del revés, ese mismo que permitió que una persona mediocre llegue a la secretaría general de la Oea.

Lo segundo es francamente incomprensible: al agradecer la designación, el señor Almagro mencionó la memoria del líder tupamaro Raúl Bebe Sendic –padre del actual Vicepresidente– un personaje de pensamiento confuso que lideró un grupo terrorista, autor de asesinatos y secuestros y que debe ser muy poco conocido en América, es decir, toda América, ya que la Oea engloba a América Latina, América Central y América del Norte. En América fue conocido Artigas, o Martí y seguramente, más que como un ícono que como un revolucionario, el Ché Guevara. Pero ¿Sendic?.

Es decir, al asumir un cargo nominalmente importante, Almagro le agradece a Sendic padre –debe ser para pagar la cuota interna en ese boniato bien confuso que es el MPP– pero a la vez dice que el resto de los americanos, los estadounidenses y las canadienses incluidos, deberíamos pedirle perdón a Cuba.

Es decir, la estupidez llegó a la Oea.