Correo de los Viernes - IMM y Adeom, una mezcla letal.

IMM y Adeom, una mezcla letal.

Por Jorge Ciasullo

La Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) y la Asociación de Empleados y Obreros Municipales (Adeom), parecen rivalizar para mantenerse como las instituciones con peor imagen entre la población de Montevideo y del país, para ello, hacen méritos un día sí y otro también.

El pasado lunes 12, estaba previsto en el marco de la temporada de Ópera 2019, la presentación en el Teatro Solís, de la obra La Flauta Mágica de Mozart. Numeroso público aguardaba en el Foyer del teatro, la apertura de las puertas de ingreso a la sala –se había anunciado un lleno total-cuando fueron informados que la presentación no se llevaría a cabo por una medida sindical.

Se supo entonces, que rato antes una delegación de Adeom, había ingresado hacia los fondos de la sala, reuniéndose en asamblea con los trabajadores, informándoles que le dirección de Adeom había resuelto, como medida de lucha, suspender la presentación, lo que provocó un gran malestar entre los desairados espectadores.

La secretaria general de Adeom, Valeria Ripoll, comentó a la prensa que la medida se encuadra dentro dela autorización genérica que otorgó la asamblea general a la directiva, luego que se declarara en conflicto, agregando que “esta fue la primera de las medidas”, que tomarán los municipales contra la administración Di Candia y que “habrá más esta semana”.

Luego, expuso las razones a distintos medios de prensa, que son variadas, entre ellas: suspensión de una reunión bipartita con Di Candia en la que estaba previsto tratar el tema de las presupuestaciones de la orquesta y de los trabajadores del Solís; el “avance privatizador” de la IMM del que resultan beneficiarias siempre las mismas empresas; Licitación para entregar a privados 12 camiones levanta contenedores; limpieza de los mismos otorgada a un privado; “ la no designación de 400 compañeras, que están esperando para ingresar”; no llamar a ofertas para el servicio de salud para los funcionarios municipales, beneficiando de esa forma a Casmu; etc. etc.

Como surge de las proclamadas reivindicaciones, las hay de todo tipo, incluso con veladas, o no tanto, acusaciones de cierta corrupción. La IMM, recauda casi 2 millones de dólares por día (Lunes a Domingo), de ellos el 43% se destinan al pago de sueldos y beneficios, tiene 8.400 funcionarios más 815 becarios y pasantes de la Udelar (10%), que luego luchan por lograr presupuestarse, apoyados por todos los compañeros. ¿Y que recibe la población a cambio de los impuestos de primer mundo que paga? No creemos necesario abundar en el tema, porque llevaría una extensión abrumadora, pero piense el lector y juzgue, en su fuero interno, como los calificaría:¿ iluminación, limpieza, estado de las calles, espacios verdes, servicios de barométrica, programas ambientales sociales y culturales…?

Detengámonos en este último, el cultural, recordemos la gestión del eximio Julio Bocca, cuya contratación en el año 2010, como Director Artístico del Ballet Nacional Del Sodre (BNS), fue un acierto, que llevó a posicionar a ese cuerpo de baile entre los mejores del mundo. Llegaron aquí, atraídos por la magia de Bocca, figuras del primer nivel, la venta de entradas fue siempre de lleno total, tanto en Montevideo y en el interior como en el exterior. Lamentablemente, luego de diversos conflictos, entre ellos realizar un espectáculo con música grabada en lugar de la orquesta (en conflicto), recibir denuncias de todo tipo (del sector sastrería por ejemplo), tener que amenazar con renunciar ante una actitud similar a la de este comentario, etc. lo llevó a “cansarse por tener que resolver problemas administrativos” y renunciar a fines de agosto de 2017.

Lo inaceptable es que la señora Valeria Ripoll, afirma, muy suelta de cuerpo, que estas medidas que se toman y se tomarán, no son contra la población, sino que es contra la administración y fundamentalmente, a su mala gestión, que se refleja en conflictos internos entre las distintas reparticiones. Agregando que hay funcionarios con cargos de dirección de áreas, que no toman decisiones, con salarios importantes y que buscan quitarse responsabilidades inherentes a su función, privatizando, y tal vez lo más llamativo: incumplimiento de un convenio firmado con el entonces Intendente Daniel Martínez , que Di Candia no aplica, manifestando, según la señora Ripoll : “ que ese problema lo resuelva la próxima administración”.

Estamos entonces frente a actitudes de Adeom, irresponsables, autoritarias y hasta patoteras, que atentan contra los derechos de los ciudadanos, de las cuales son responsables todas las administraciones frentistas, desde Tabaré Vásquez hasta el actual Intendente, que las permitieron y toleraron. En definitiva, gestión municipal más Adeom: mezcla destructiva.