Durante 2020, el gobierno invirtió 1.217 millones de dólares en la pandemia, el equivalente a 2,3 % de su PBI. Las transferencias sociales tuvieron un aumento del 40 % con respecto al año anterior y alcanzaron a más de 840 mil beneficiarios. Se resignaron aportes patronales y personales, se otorgaron subsidios y créditos para Pymes y se creó un nuevo régimen de seguro de desempleo. Así y todo, se cumplieron todas las estimaciones fiscales sin subir impuestos. De todas formas, queda mucho por hacer.

Previo a la asunción del nuevo gobierno, Uruguay se encontraba atravesando una profunda crisis económica. En el último semestre en el que gobernó el Frente Amplio, la economía uruguaya entró en una fase recesiva, con una caída del 1,6 % del PIB. Además, el 2019 cerró con los peores niveles de empleo en diez años -157.900 desempleados, equivalentes a un 10.5 % de desocupación- y un déficit fiscal por encima del 5 % del PBI al cierre de ese año.

No obstante a eso, desde el inicio de la pandemia, el Frente Amplio ha pretendido hacernos creer que hay margen para gastar y gastar, sin miramientos ni culpa. De la mano de la vieja consigna del "Estado ausente", la oposición solicitó, primero, una renta universal, y luego, impedir los despidos, tomar más deuda con los organismos internacionales de crédito y hasta utilizar las reservas del Banco Central.

El pasado lunes 8, la ministro de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, presentó el balance y las perspectivas macroeconómicas del Uruguay, demostrando que se puede tener un Estado presente sin la necesidad de destruir la economía, como pretende el Frente Amplio con sus propuestas.

Durante la presentación, Arbeleche aseguró que nuestro país "atravesó" y "sigue atravesando" una pandemia sin precedentes. Como respuesta, manifestó, "Uruguay destinó 1.217 millones de dólares para hacer frente a la pandemia, un 2.3 % del PBI de Uruguay. Esto es más que nada debido a la respuesta del Fondo Coronavirus y los préstamos garantizados del Estado".

Además, aclaró, que esta situación "se dio en un contexto en el que Uruguay perdió por recaudación unos 2.000 millones de dólares"; sin embargo, "se cumplieron todas las estimaciones fiscales y sin suba de impuestos".

Según la jerarca, existen algunas "señales alentadoras" que llevan al gobierno a pensar que "lo peor habría quedado atrás"; no obstante, se seguirá "apoyando el combate a la pandemia en esta última etapa". Arbeleche explicó que la estimación para atender la pandemia en 2021 es de 520 millones. "Eso es hoy, porque no sabemos cuándo finaliza la pandemia. Los recursos van a estar", manifestó.

La ministra puso énfasis en el cumplimiento de las metas fiscales, pese al "contexto adverso" y a "que no se escatimó" en ayudas. Puso como ejemplo que "el déficit fiscal de todo el sector público global fue del 6 % del producto en 2020 y que en el Presupuesto se estimó 6,5 %".

Por otra parte, explicó que el Fondo Coronavirus tuvo erogaciones por 711 millones de dólares, lo que representa el 1,3 % del PBI. La mayor parte del Fondo se destinó a seguros de desempleo (238 millones de dólares), resignación de aportes personales y patronales (213 millones) y ayuda social del MIDES (144 millones). Además, se destinaron recursos para medidas de Salud Pública (48 millones de dólares), seguros de enfermedad (26 millones), licencia de la construcción (17 millones) y otros insumos (25 millones).

Las medidas de "apoyo a hogares" consistieron en el reforzamiento de planes sociales (TUS, INDA, AFAM-PE y TuApp), el seguro de enfermedad para mayores 65 años, la creación de nuevos refugios para personas en situación de calle y la cobertura transitoria FONASA a desempleados, puntualizó la ministro. Por su parte, las medidas de "apoyo al sector productivo con foco en Mipymes" consistieron en una exoneración del 40 % de los aportes patronales y personales, el aplazamiento del vencimiento de tributos, la creación de un nuevo seguro de desempleo, subsidios (monotributistas MIDES, alquileres y artistas) y medidas para el turismo (IVA cero a hotelería, devolución nueve puntos de IVA y arrendamiento de autos gastronomía, exoneración irpf e irnr).

La ministro detalló las medidas sociales y aclaró que las transferencias tuvieron un aumento del 40 % con respecto al año anterior, pasando de 602.410 beneficiarios en 2019 a 840.617 en 2020. De igual forma, aseguró que hubo un aumento de 56 % entre las transferencias sociales que se hicieron en 2019 y las que se destinaron en 2020, pasando de $ 10.360 a $ 16.165 millones.

Sobre el Sistema Nacional de Garantías a Empresas (préstamos SIGA), aclaró que el monto total del crédito en el 2020 fue de 689 millones de dólares. Este total de 689 millones fue garantizado por fondos estatales que ascienden a 506 millones de dólares, y este número, repitió, "es el que se presentó inicialmente cuando se dijo que se respondió a la pandemia con 711 millones del Fondo Covid y 506 millones de las garantías del SIGA. La respuesta a la pandemia fue contundente".

Para finalizar, Arbeleche aseguró que, pese a lo anterior, el gobierno logro cumplir con "la estimación del resultado fiscal, la mejora en el resultado estructural, el tope del aumento de gasto, el endeudamiento neto del gobierno central y la inflación".

"Cuando nos dijeron que las proyecciones eran muy optimistas dijimos que eran realistas y que era la mejor estimación que podíamos hacer. Claramente no eran proyecciones optimistas sino que fueron proyecciones que en su totalidad se cumplieron. Haber ahorrado en 2020 U$S 660 millones de dólares es muy importante", concluyó.

Como era de esperar, los principales responsables de la debacle económica previa a la pandemia, salieron rápidamente a poner en duda los dichos de la ministro. Los economistas y senadores frenteamplistas, Mario Bergara y Daniel Olesker, manifestaron que les parece "insólito" que se "sumen peras con manzanas" para "dibujar engañosamente" el número de los recursos volcados para contribuir en la lucha contra la pandemia. Según ellos, no está bien que se "sumen 500 millones que no son gasto", refiriéndose al monto de crédito garantizado por el sistema de garantías.

En respuesta a los cuestionamientos, Arbeleche aclaró lo obvio: "en el día de ayer compilamos todos los datos de 2020 del Fondo Covid, estos 711 millones de dólares, y dijimos claramente que esto era Fondo Covid, y por otra parte hablamos de las garantías que da el Estado, que son 506 millones de dólares, para dar más préstamos. Porque los préstamos que se otorgan con estas garantías son mayores. No sumamos el número de créditos, sino de las garantías".

A diferencia de lo que sostienen los gastadores compulsivos del Frente Amplio, la ministro nunca hablo de "gasto", sino de la totalidad de recursos volcados por el Estado: "a ese comentario de las frutas, le digo que las peras son peras y las manzanas son manzanas. Lo que se tradujo ayer fue la totalidad de los recursos que claramente el Estado puso a disposición para enfrentar la pandemia, que son 1.217 millones de dólares", reiteró Arbeleche.

En definitiva, aunque el Frente Amplio se esmere en construir un relato desleal y malintencionado en torno al combate a la pandemia, las pruebas saltan a la vista y quedan aquí documentadas para ayudar, en el futuro, a los desmemoriados. Si no tienen nada para aportar, deberían tener la deferencia de llamarse a silencio.