Campeonato de improvisaciones impone una pausa

Ante el previsible fracaso de la misión enviada a Estados Unidos, el gobierno habilitará ahora otras formas de venta de marihuana, instalando bocas de venta más allá de las farmacias. Siguen los talenteos en vez de hacer una pausa y revisar toda la política, como el sentido común aconseja.

Pese a que la ley de marihuana se estudió por dos años en el parlamento y luego demoró otros dos años en reglamentarse y aplicarse, su funcionalidad sigue completamente en duda, ya que el gobierno no encuentra formas legales para superar los controles financieros internacionales a los que el país está sometido voluntariamente.

Como se recordará, el senador Mujica exigió con vehemencia, amenazando con trancar toda la actividad parlamentaria, que el equipo económico encontrara soluciones ante el bloqueo que la banca debió imponer a los flujos financieros asociados a la comercialización del cannabis, prohibida por varias leyes vigentes y por tratados internacionales. Ante ello surgió la idea de que el presidente del Banco Central, Ec. Mario Bergara, y el prosecretario de la presidencia, Dr. Juan Andrés Roballo, concurrieran a Estados Unidos a “convencer” a los bancos y a legisladores de ese país de que la operativa en Uruguay podría desarrollarse sin riesgos. La misión fracasó rotundamente, como habían anunciado acá expertos con vinculaciones internacionales, ya que fue un despropósito del gobierno creer que los legisladores de Estados Unidos y los ámbitos financieros se sensibilizarían ante el ruego de un pequeño país que hace una experiencia aventurera y, como se ve, irresponsable.

Ante esa situación, la respuesta oficial parece de Ripley: van a habilitar otros lugares de venta además de las farmacias, que son las únicas habilitadas por la ley. Pero el gobierno no va a modificar la ley, sino que lo hará por decreto, según las informaciones dadas por el prosecretario Roballo, quien intentó explicar que se trata de autorizar a negocios nuevos, que no operarán con los bancos y trabajarán al contado y que, previsiblemente, estarán condenados a la más absoluta informalidad. Es decir, el gobierno promueve la instalación de “bocas de venta”, pero “oficiales”. Un contrasentido absoluto.

El Centro de Farmacias rechaza la iniciativa porque considera, con razón, que la ley les dio a las farmacias la exclusividad de la comercialización.

Como ya informamos en Correo de los Viernes, la ley de marihuana violenta varios convenios internacionales y sin haberlas derogado, contradice las leyes vigentes de bancarización y de control del lavado, por lo que la incertidumbre jurídica es total.

A ello se suma la contradicción esencial de que el resultado inicial de la política oficial es un impulso al consumo, que según algunos medios ha crecido notoriamente. El Observador sostiene que “la legalización ha expandido notoriamente el consumo de la droga sin abatir el narcotráfico con marihuana de contrabando y otra vasta gama de estupefacientes, eliminando el argumento de que se defendería la salud pública”.

Quiere decir que todo es un fenomenal entrevero, que hace pensar que la ley no funciona y que ya es una experiencia fracasada. Hay contradicciones legales, hay marchas y contramarchas del gobierno, la experiencia con las farmacias viene haciendo agua por todos lados, las obligaciones internacionales del país no pueden abandonarse, los bancos se niegan con fundamentos a participar de un negocio considerado ilícito, los ataques a la salud pública son indudables, la contradicción con las propuestas sobre el tabaco y el alcohol son evidentes. ¿Qué más hace falta para concluir que la ley ha fracasado y que Uruguay debe revisar, con sinceridad y visión nacional, toda su política sobre las drogas?

Todo ello, entonces, ameritaría introducir una pausa legal en el tema, suprimiendo la venta en farmacias o cualquier otro tipo de comercio, circunscribiendo por el momento la liberalización al auto-cultivo y los clubes canábicos, que debió ser el paso original en lugar del abstruso embrollo jurídico —y práctico— en que la iniciativa “mujicana” derivó.

El gobierno no debe considerar que una actitud de revisión, consultando a todos los partidos políticos y actores sociales, se advierta como un acto de debilidad o de pérdida de autoridad. Por el contrario, las autoridades aparecen frágiles y desdibujadas con sus permanentes vacilaciones y confusiones. Como ocurre con tantos otros temas, el presidente Vázquez debería tratar de sintonizar más con el resto de la opinión pública que con las ecuaciones de las rencillas internas del Frente Amplio. Estamos convencidos que al día de hoy la inmensa mayoría de la población tiene rechazo por esta política aventurera.

El propio Mujica —que hoy aparece tan enojado por la frustración de su proyecto— había señalado en 2013 que podría “dar marcha atrás” si “la realidad demuestra que estamos equivocados”. A la luz de lo que viene ocurriendo, es la hora de revisar la política implementada.



Un Frente más angosto
¿Qué es lo primero?
Julio María Sanguinetti
Ganancias de ANTEL: U$S 246,4 millones de dólares
Yo te creo... ¡si sos compañero!
La "paternidad" del grado inversor no es frentista
Los agoreros del desastre se quedaron con las ganas
Uruguay destaca en clima de negocios
De certificados falsos y horas truchas...
"El pasado de una ilusión"
Contrastes: Expoactiva y agro negocio, Facultad de Ciencias Sociales y marxismo
Tomás Laguna
Coraje en el Quebracho. Testimonios de los valientes.
Leonardo Vinci
Las universidades norteamericanas: ¿la nueva cloaca moral de occidente?
Jonás Bergstein
Construcción del Antel Arena: una historia que debe terminar
Jorge Ciasullo
Constitución Federal de los Estados Unidos de América
Daniel Torena
Chile, a medio camino
Las supercherías de Judith Butler
Frente a Putin, respuesta o derrota
Frases Célebres 983
Tenía que sobrevivir. Cómo un accidente aéreo en los Andes inspiró mi vocación para salvar vidas
LA LIBRERIA
Inicio - Con Firma - Ediciones Anteriores - Staff Facebook
Copyright © 2021 Correo de los Viernes. Publicación de la Secretaría de Prensa del Foro Batllista.